¡Excelencia! Es un modelo de trabajo digno de elogio de este extraordinario equipo que brilla con luz propia por su esmero en la reconstrucción mamaria en "Mi Querido Hospital Infanta Sofía". Mil gracias Dras. Marta García y María L. Manzanares.

 Trabajando con las cirujanas plásticas del Hospital Universitario Infanta Sofía.

¡Excelencia! Es un modelo de trabajo digno de elogio de este extraordinario equipo que brilla con luz propia por su esmero en la reconstrucción mamaria en "Mi Querido Hospital".

Muchas gracias por el cuidadoso trato humano que con cercanía dan a sus pacientes en el tratamiento y seguimiento en las cirugías de reconstrucción mamaria.

Pendiente cada día de mis pacientes y del equipo interdisciplinar de doctores que pautan y consiguen  la excelencia, aprendiendo y mucho, porque esta vida es una continua búsqueda para descubrir áreas de mejora, empoderando al paciente y velando por él en todo momento desde su ingreso hasta el alta.

Ginecólogos, oncólogos, cirujanas plásticas, interconsultas con endocrinos, nefrólogos según necesidades de las pacientes así se trabaja en el Hospital Infanta Sofía, en equipo, somos un hospital mediano en tamaño y con profesionales comprometidos que luchan y consiguen el bienestar del paciente.

La excelencia en nuestro trabajo sale de la pasión por él,  de nuestra vocación, nos gusta lo que hacemos, buscamos hacer bien el bien, damos atención integral e integrada en cada cuidado asistencial, somos felices y tenemos una gran satisfacción de hacer nuestro trabajo con excelencia, así nos lo reconocen nuestras pacientes que son muy agradecidas.

Gracias Dra. Marta García Redondo y Dra. María L. Manzanares Retamosa por su compromiso con la paciente, por dar excelencia, por ocuparse y preocuparse de la paciente hasta el momento del alta que es entrañable ver lo agradecidas que quedan las pacientes y su familia.

Gracias por valorar nuestro esfuerzo y ayuda a todas las sanitarias que colaboramos con ustedes en conseguir que los pacientes nos recomienden y nos hayan elegido.

El salario emocional a todo el personal que colaboramos con ustedes es de agradecer nos sentirnos valoradas y reconocidas como personal de excelencia en la reconstrucción mamaria.

Vale la pena dar lo mejor de tí, por el paciente, por la institución a la que representamos, por la satisfacción propia que te llena de orgullo percibir cuando se van con el alta domiciliaria la enorme gratitud que te da la paciente y sus familiares.

Aquí seguimos humanizando cada gesto con el paciente, esta vida es un boomerang, a veces tomamos de nuestra propia medicina, somos sanitarios, somos pacientes y somos profesionales muy comprometidos dando lo que mejor sabemos dar buen trato y buen tratamiento. 

Desde la cuarta planta de la torre tres gracias por elegirnos, gracias por recomendarnos. 

Fdo. Victoria Martín Egido.